Los pastizales son las comunidades ecológicas formadas por un estrato herbáceo de gramíneas perennes con una dominancia superior al 70 %.
En el territorio mexicano, se ubican dentro de la ecorregión del Desierto Chihuahuense, el cual, es considerado el más grande del continente americano y una de las regiones secas con mayor riqueza de especies del mundo.
Los servicios ambientales que nos brindan los pastizales mantienen el buen funcionamiento del ecosistema y la calidad de vida de sus habitantes, algunos de estos son:
Participan en la captura de carbono atmosférico para su conversión en biomasa.
Constituyen uno de los ecosistemas pastoriles más adecuados para dar sustento a los animales herbívoros domésticos que a su vez sirven para el consumo humano.
Proveen hábitats que constituyen zonas de alimentación, reproducción o descanso para diversas especies.
Participan en la infiltración de agua para la recarga de acuíferos.
Mitigan los efectos del cambio climático al evitar la degradación de los suelos.
Su extensión y conectividad con otros tipos de vegetación mantiene el flujo genético de la biodiversidad.
En América del Norte y el Caribe existen 59 especies de aves que dependen estrictamente del refugio y alimento que les ofrece el pastizal. Además, existen otras 97 especies que se benefician de los recursos de hábitat que les brinda este ecosistema.
Las aves asociadas a los pastizales representan 80 géneros que pertenecen a 31 familias, de las cuales, al menos 63 de estas especies arriban en alguna temporada del año, principalmente durante el invierno, a los pastizales del Desierto Chihuahuense, provenientes de las zonas reproductivas del norte. Dichos pastizales se caracterizan por distribuirse de forma intermitente entre valles intermontanos y valles divididos por sierras y cordilleras aisladas.
Las aves de pastizal son uno de los grupos más especializados, muchas especies no viven en ningún otro hábitat y casi todas tienen necesidades muy específicas que les proveen los distintos tipos de pastizal. Diferentes estudios han mostrado que son muy sensibles a la estructura del pastizal y que los requerimientos específicos varían entre especies.
Las especies prioritarias para la conservación se pueden seleccionar según su abundancia, su estatus de endemismo, la dependencia de un hábitat determinado para su ciclo biológico (como las aves obligadas de pastizal) y su importancia biológica dentro del ecosistema. El esfuerzo para conservar a estas especies trasciende al territorio mexicano, involucrando distintas instituciones para la conservación de fauna silvestre migratoria de Estados Unidos y Canadá.
Algunas de las especies de aves migratorias importantes en la conservación son las siguientes: Gorrión chapulín (Ammodramus savannarum), Gorrión de Baird (Centronyx bairdii), Zarapito pico largo (Numenius americanus) Bisbita llanera (Anthus spragueii), Gorrión de ala blanca (Calamospiza melanocorys), Chorlo llanero (Charadrius montanus) Gorrión sabanero (Passerculus sanwichensis), el Escribano de collar castaño (Calcarius ornatus) y el Escribano de McCown (Rhynchophanes mccownii).
Bibliografía
Bird Conservancy of the Rockies. 2021. Guía de bolsillo para las aves de pastizal del Desierto Chihuahuense.
Levandoski, G. y A. Panjabi. 2014. Las aves de pastizal, en: La biodiversidad en Chihuahua: Estudio de Estado. conabio. México, pp. 128-134.
Pronatura Noreste A. C. 2019. Reporte del Estado de los Pastizales del Desierto Chihuahuense.
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